El Dios que creo el universo es el centro de todo en existencia, no tú. Dios sabe todo y para El, tu gozo en el cielo es más importante que tu felicidad terrenal. Las palabras de Jesucristo: “Si alguien quiere ser mi discípulo, que se niegue a sí mismo, lleve su cruz cada día y me siga. Porque el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa, la salvara” son verdaderas. Solamente por el poder sobrenatural del Espíritu Santo es posible negar nuestros deseos y metas para seguir a Jesus – y recibir la vida que Dios ha planeado para nosotros, que es mucho mejor. El Espíritu Santo es autor de la Biblia y nunca nos va a guiar en contra de las escrituras. Hay que depender del Espíritu Santo para interpretar la palabra de Dios correctamente y recibir poder para evitas las trampas del diablo. Tu disponibilidad para obedecer cada versículo de las escrituras, cueste lo que cueste, te dará una vida que vale la pena. Recuerda que el pecado es la cosa más peligrosa del universo y vas a perder muchas bendiciones por cada pecado que cometas. Debes vivir con la eternidad en mente.


Archivo que contiene todo el material escrito (Texto)

 

 

Lección 1. El mundo de mí mismo, una cárcel cruel

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Lección 2. Muriendo a ti mismo para vivir por Cristo

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Lección 3. Conquistando la carne por medio del Espíritu

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Lección 4. Viviendo por la Eternidad

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